Soltar las riendas de mi vida y entregárselas a Dios, me ha ayudado mucho a encontrar la paz y la serenidad del desprendimiento emocional, he aprendido que cuando me obsesiono (por una persona, una situación) me hago mucho daño, yo misma me conduzco a la locura, a ideas y pensamientos insanos, tratando de arreglar o controlar, aquello sobre lo que no tenía poder y la verdad, es un cansancio mental, emocional, espiritual, que me deja agotada y sin ánimos.
De repente vi con claridad que soy libre de sentir un amor inconmensurable por esa persona que tanto me lastimo, al mismo tiempo oro para tener la fuerza para desprenderme de mis anhelos y decepciones, le pido a Dios que me ayude a perdonarla para que afloje los lazos que me atan a la tristeza y a la frustración.
Cuando suelto las riendas de mi vida y se las entrego a Dios, el péndulo que oscila entre blanco y negro de la obsesión y la indiferencia, encuentra su equilibrio en los colores pacíficos de la serenidad. Desprendernos del dolor de perder una relación importante es difícil, me ayuda recordar que tengo un compañero constante y seguro, mi Poder Superior.
Para mí, soltar las riendas fue muy difícil, pues siempre he sido una persona controladora, es algo con lo que trabajo día con día…el control, lo empecé hacer un día a la vez, soltaba a Dios la rienda de mi vida y luego se la quitaba, porque aparte mi impaciencia no ayudaba, me desgaste física, emocional y espiritualmente, que difícil ha sido controlar a Margarita, más sin embargo estoy en el camino, permitiendo que mi Poder Superior ilumine mi sendero.
Para mí hoy, soltar las riendas, es como un árbol que pierde sus hojas de otoño, debe dejarlas caer, para crecer y producir aún más belleza en la primavera y el verano siguiente, dejar de lado lo que no necesito de verdad, pensamientos, cosas o comportamientos obsoletos conlleva a un nuevo crecimiento en mi vida.
Solté las riendas de lo que los otros decían o no decían y de lo que hacían o no hacían, solté las riendas de mis expectativas, ya no sentía la necesidad de complacer a todo mundo, empecé hacerme más responsable de mi persona, soltar las riendas no significa abandonar mis responsabilidades, al contrario me vuelvo más responsable de mí.
Al aprender como soltar con amor, he recibido un don maravilloso..una vida propia.
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Excelente articulo
Este continua siendo uno de los mas dificiles pasos en mi camino de recuperacion, puente contigo en eso del control y encima muy perfeccionista, se q soltar las riendas es lo unico q me da la paz y el respiro q mi alma necesita pero lucho constantemente con esto porq quiero q las cosas sean a mi manera, gracias por refrescarme mi bliblioteca mental con este tema y porq me sigo dando cuenta q sigo teniendo mucho trabajo por hacer pero tengo mucha fe en el progreso q el programa nos da asi q a seguirle dando, gracias por aventarnos estos ladrillos para q la enfermedad emocional salga 😊
Tremendamente difícil soltar. Sin embargo los q estamos en este camino hemos avanzado mucho y la serenidad q esto conlleva es muy sanadora .
Si amiga es muy difícil, es un trabajo de día a día, luego viene la libertad, la serenidad, La Paz de espíritu 😘
Soltar las riendas y entregárselas a Dios significa para mi hacerme más responsable y cuidadosa de mi vida. Le suelto las riendas a mi poder Superior con plena fe en q el obrará en mi vida y obvio con el cuidado y esmero q yo le de. Es decir también tengo que hacer mi trabajo y esmero yo misma. Animo
Me encantó que soltar las riendas es como un árbol que pierde las hojas e otoño….
Gracias por eso, porque a través de tus palabras en este blog, nos has dado el maravilloso regalo de conocerte, de entender y comprender que necesito desprendimiento con amor, hacerme responsable de mi
Así es desprendimiento con amor te da la libertad, Esperanza, Fortaleza y sobre todo Aceptación, que no podemos cambiar a nadie porque nos desgastamos físicamente, emocionalmente y espiritualmente.💕💕💕💕